Los ejercitadores de suelo pélvico son dispositivos especialmente diseñados para prevenir disfunciones como la incontinencia urinaria, fecal, los prolapsos genitales, o laxitud vaginal. Son un complemento a la rehabilitación realizada en la clínica y facilitan un mayor progreso en la recuperación de lesiones del suelo pélvico.
Los dilatadores íntimos proporcionan una ayuda en los tratamientos de dispareunia, vaginismo, hipertensión, dolor perineal, o fibrosis de las cicatrices perineales. La rehabilitación de estas disfunciones suele ser prolongada, de ahí la recomendación de usar estos dispositivos en casa, ya que facilitan el estiramiento de las paredes vaginales y puntos de máxima tensión.
El uso de taburetes ergonómicos para defecar permiten adoptar la postura recomendada a la hora de evacuar heces. Es un dispositivo que simula la posición primitiva, en cuclillas, con la que conseguimos evacuar de una manera más natural y evitar esfuerzos.
Al contrario de las fajas abdominales, los cinturones pélvicos son elásticos y no inmovilizan. Provocan una corrección postural, disminuyen la hiperlordosis, aumentan la estabilidad y permiten el trabajo muscular más eficaz.
Los productos de salud e higiene íntima están especialmente recomendados en las primeras semanas tras dar a luz, tanto en casos de cesárea como parto natural. Ayudan a cuidar las zonas más sensibles como las cicatrices perineales, la herida de la césarea u otras intervenciones quirúrgicas.